viernes, 31 de agosto de 2012

Protección de los Awliya’Allah


Bismillahi Rahmani Rahim
Ashadu an-la ilaha il Allah, ve Ashadu anna Muhammadan Abduh ve Rasuluhu. Salallahu Ta'ala Alayhi ve ala Alihi ve Sahbihi ve Sallim.

Si el hombre empieza su día con la Shahadat, si el musulmán, si el mu’min, si el murid comienza su día con la shahadat, renovando su shahadat, renovando su religión, renovando su promesa a su Señor, ¿cómo puede el Señor entonces dejar que todo su día sea un desastre?
Imposible. Ya que el hombre que dice la shahadat, ha ganado Dunya y Ajirat.

Él se ha renovado a si mismo, se ha vuelto puro. Se ha convertido en aquel que si el ángel de la muerte se lo lleva en ese momento, va a estar libre de todas las cosas malas, de todos los pecados.
Eso es una garantía que nos ha dado Allah –swt-,  Su Sagrado Profeta (asws), y que nos ha enseñado nuestro Sheykh.

Si un incrédulo toda su vida lleva a cabo todas las cosas equivocadas, nunca recordó a su Señor ni una sola vez, nunca hizo saydah para su Señor ni una vez, tal vez,  de alguna manera, de algún modo, en su último aliento, algo le llega a través de la misericordia de su Señor.

Tal vez dijo algo que complació  a los Awliya’Allah, los amigos de Allah, que a su Señor agrada, ya que en estos días tantos incrédulos van a encontrar seguridad porque les gustan y aman a los amigos de Allah sin ninguna razón real, pero que les gusta la forma en que visten, les gusta la forma en que hablan, se sienten bien al lado de estos hombres diciendo: “Este es un hombre santo; no sabemos nada acerca de la religión, ni de la espiritualidad, pero este hombre, nos sentimos bien con él. No sabemos lo que es la santidad, pero este es un hombre santo.”

Ese va a encontrar seguridad, porque los Awliya’Allah no lo van a abandonar en su lecho de muerte cuando él ama a ese amigo (wali), él está poniendo ese amigo de Allah en su corazón.

Es muy fácil para los Awliya’Allah tocarlo y sacarlo del fuego hacia la protección haciendo que su lengua y su corazón se vuelvan a decir “Ashadu una-la ilaha il Allah, he Ashadu anna Muhammad Abdu ve Rasuluhu.” Es muy fácil para los Awliya’Allah hacerlo.

Hay tantas personas en estos días, llamados musulmanes, llamados mumins, incluso los que se llaman murids pertenecientes a sheykhs diferentes, pertenecientes al Sultan ul- Awliya tal vez, pero que están viendo a aquel que es amado por Allah, quien es amado por Su Profeta (asws), lo están mirando con malos ojos. Tampoco por razón real alguna.

Mirando con malos ojos, teniendo ideas equivocadas, teniendo sospechas equivocadas sin sentarse a pensar, comprender, tener inteligencia que les muestre el camino, pero permitiendo que sus egos los engañe, sin agradarles el amigo de Allah, teniendo pensamientos equivocados hacia ese amigo de Allah.

Posiblemente se encuentren con un montón de problemas en zonas muy peligrosas antes de morir. Y si se encuentran en zonas peligrosas antes morir, entonces, en la tumba y en el Día del Juicio, Allah sabe más.

- Khoja Lukman Effendi-

miércoles, 29 de agosto de 2012

La Señal de la Servidumbre


Bismillahi Rahmani Rahim
Estamos siguiendo el Camino Nakshibendi, que es el Camino Siddiki, camino que proviene de Abu Bakr Siddik (ra) y llega hasta nuestros tiempos.
Debemos corregirnos a nosotros mismos, especialmente en estos días; y especialmente en estas noches debemos hacer la indiferencia a un lado, debemos hacer a un lado los incorrectos deseos egoístas, a un lado los incorrectos caminos egoístas, y debemos pedir a nuestro Señor Allah-swt-:
“¡Ya Rabbi! Te pedimos perdón por toda falta que estamos cometiendo. Sabemos que no hemos llegado a ningún lado. Todo lo que hacemos no se ajusta a tu Divina Presencia. Acepta este débil servicio, haznos dignos, buenos, y cuéntanos entre ellos.”
Debemos pedir. Esto es algo que la Nación, la Ummat, también ha perdido. No están pidiendo. Solíamos ir a las mezquitas y ver a personas ancianas durante horas abriendo sus manos, llorando y pidiendo. Cuando éramos jóvenes decíamos: “¿Por qué esos hombres lloran tanto y piden? ¿Qué es lo que piden? ¿Qué es lo que quieren?” Ellos no querían nada mundano, y eran gente correcta que pasaban todas sus vidas en las mezquitas. Eso era lo que sabíamos y aun así estaban allí sentados por horas y horas, pidiendo y llorando.
Esto es lo que hemos perdido. Sheytán nos está engañando. Sheytán nos dice: “Ah, la misericordia de Allah está allí. No te preocupes.” Es así que mediante un ayat Allah nos dice: “Ese Sheytán llega a ti con la misericordia de Allah (hablándote acerca de ella). No seas engañado por eso.”
Tienes que hacer lo que es para ti. Debes cumplir con lo que te ha sido dado. Si no estás cumpliendo con eso entonces no tienes el derecho de esperar la misericordia de Allah porque no estás pidiendo y no te estás preparando (para ella).
Un hombre puede hacer todo tipo de cosas incorrectas, pero si su corazón está en el camino recto y todo el tiempo está intentando hacer lo mejor, saliendo fuera y haciendo lo incorrecto, luego yendo a la Presencia de Allah diciendo: “¡Ya Rabbi! Soy alguien débil. Por favor, perdóname”, ese puede esperar y aguardar la misericordia.
Sin embargo ellos ni siquiera se molestan en pedir, ni siquiera se molestan en decir: “¡Ya Rabbi! Perdóname”. Especialmente en estos días cuando le hablas a la gente diciéndoles: “¿Por qué no pides? ¿Por qué no pides perdón?” Dicen: “No he hecho nada malo, ¿por qué tengo que pedir perdón? Estoy bien. No estoy molestando a nadie. No estoy haciendo esto y no estoy haciendo eso.” Hmm. Eso no es suficiente.
Por lo tanto tenemos que tomar como ejemplo a los antiguos. Cuando miramos sus vidas y las comparamos con las nuestras, vemos que hay una distancia de millones de años entre ellos y nosotros. Ellos no vivieron por este dunya. Vivieron por ‘Ajirat. Vivieron por Allah-swt- y Su Profeta (asws). Ellos observaron todo y cada paso correctamente, y aun así permanecieron allí pidiendo.
Esa es la señal de la servidumbre. El siervo debe pedir.
-Sheykh Abdul Kerim Effendi-

sábado, 25 de agosto de 2012

Hadra en la Dergah Osmanli Nakshibendi


Sayidina Ali, que Allah esté complacido con él, dijo: “Me visitó el Profeta (asws) y le saludamos con Jafar (ibn Abi Talib) y Zayd (ibn Haritha). El Profeta (asws) le dijo a Zayd: ‘Tú eres mi liberto’ (anta mawlay), tras lo cual Zayd comenzó a bailar sobre una pierna alrededor del Profeta (asws). El Profeta (asws) entonces dijo a Jafar: ‘Vosotros os parecéis a mí en cuanto a creación y en mis modales’ (ashbahta khalqi wa-khuluqi), con lo que Jafar comenzó a bailar detrás de Zayd. El Profeta (asws) entonces me dijo: ‘Ustedes son parte de mí y yo soy parte de ustedes '(anta Minni wa-ana visun)’, con lo cual empecé a bailar alrededor de Yafar” 
(Narración citada por los Sabios en cuanto a la permisibilidad de la práctica tradicional del Hadra)

La Esencia del Marifat


Bismillahi Rahmani Rahim
Cuando llega el final, nadie puede cambiar esa realidad.

Tan pronto en cuanto ese espíritu abandona este cuerpo, el cuerpo ya ni siquiera puede permanecer parado. Los dedos ya no se mueven. Nada se mueve. Ese espíritu abandona el cuerpo. Cuando eso ocurre el cuerpo cae como una roca o madera o lo que sea que arrojes y cae, y permanece de esa manera.

Luego lentamente empieza a tener mal olor, comienza a desaparecer, y la tierra lo limpia todo. Lo que sea que has puesto en el interior de la tierra, lo va a limpiar.

Si llegas a ese punto en el que el cuerpo empieza a desaparecer (a descomponerse) y la tierra lo está comiendo, eso también es un problema. Eso significa que no te has limpiado a ti mismo en este mundo, por lo que la tierra va a lavar ese cuerpo para limpiarlo y en el Día del Juicio Allah-swt- va a dar otro cuerpo a la persona que está bajo el suelo.

Así que estamos creyendo en eso. Nos estamos preparando a nosotros mismos para insha’Allah no caer en esa situación  y para que cuando salgamos de este mundo nos vayamos limpios, cuando entremos a la tumba esa tierra no nos toque y que ese cuerpo se levante (tal cual ha sido) para el Día del Juicio.

Eso es Marifat. Marifat es eso. No el Marifat de caminar sobre el mar o volar por el aire, no. ¡Cuántos que en estos días están diciendo: “Tengo estas habilidades, soy esto y soy aquello”!

Puedes tener cualquier cosa y todo en el mundo. Puedes saltar desde aquí y alcanzar el primer cielo. Si no te estás yendo limpio a la tumba, entonces no eres una persona con Marifat.

-Sheykh Abdul Kerim Effendi-

miércoles, 22 de agosto de 2012

La caravana de nuestro Sheykh marcha hacia delante


Bismillahi Rahmani Rahim

Cuando el Sagrado Profeta (asws) se retiró de este mundo dejó tras de si pilares poderosos. 124.000 Sahabis, ellos estaban allí. Sin embargo, luego de que él partió, ¿qué ocurrió? ¿Qué le ocurrió a Arabia? ¿Qué les ocurrió a los beduinos, a la mayoría de ellos que dieron su bayat al Profeta?

Lo traicionaron. Dijeron: “¿Por qué ahora tenemos que seguir a Abu Bakr? Nuestro bayat fue con el Sagrado Profeta (asws), quien ha acabado. Él ha acabado. Somos independientes, podemos hacer como nos guste.”

Sucedió. Sucede. Y va a continuar sucediendo.

Algunos se declararon profetas, Musaylamah, el mentiroso. ¿Hazrati Abu Bakr le dijo: “Bueno, vamos a sentarnos. Hagamos una reunión y negociemos”? ¿Lo llamó diciéndole: “Bueno hablemos bien”?

Él envió un ejército para acabarlo. Así es, e incluso hubo mujeres profetas. Esto es historia. Niégalo cuanto quieras.

Así es, mujeres profetas viviendo y declarando: “Sí, también somos profetas.”

Sheykh Effendi Hz. ha mencionado esto tantas veces, y yo voy a continuar diciéndolo, te guste o no. Y esas también fueron quienes se sentaron en la presencia del Profeta (asws) y tomaron algo del Profeta, y ahora van y declaran ser algo. Y esa también está acabada. Esa y Musaylamah se casaron, y el uno le daba la dote a la otra diciendo: “Oh, no hay necesidad de cinco oraciones diarias; tres oraciones diarias, mi querida. Esa es mi dote para ti.”

Ocurrió.

Así que, estos no son cuentos. Son historias, experiencias, realidades que ocurren y que van a continuar ocurriendo.

¿Qué parte de la historia vas a jugar?

Aquellos que continuaron luego de la partida del Sagrado Profeta (asws) siguieron con su trabajo. No lo hicieron a un lado. No lo debilitaron. Se volvieron más fuertes. Se volvieron incluso más rigurosos.

Hazrati Abu Bakr, ese que era tan suave cuando el Sagrado Profeta (asws) estaba vivo, ese del que incluso su hija decía: “Ya Rasulullah, no hagas que mi padre sea Imam ya que llora demasiado (al momento de dirigir la oración, Abu Bakr entraba en tal estado de emoción espiritual que no podía contener el llanto)”, ese se volvió un león. Él se transformó en un león. Así es. Y acabó con tantos desobedientes…

Nuestra aspiración, nuestra intención, nuestra niyat, es volvernos buenos obedientes de nuestro Sheykh. Él no está muerto. Algunos dicen: “el muerto está muerto.” Él no está muerto. Él está velado. Incluso Sheykh Mevlana ha dicho: “Es una apariencia. Él se ha ido al Monte Qaf.”

“No digas de quienes han muerto en el Camino de Allah que están muertos”, ¿no es así esta ayat? ¿No la conocen todos? Especialmente la gente sufí, ¿no la conocen?

Así que esos que dicen, “él está muerto, él está muerto”, como gusten. El ayat dice otra cosa. El Qur’an dice otra cosa. Tu Grandsheykh dice otra cosa. Tú puedes decir lo que quieras porque los perros ladran. Ladrar es el deber de los perros, pero la caravana continúa. Insha’Allah ar-Rahman, continuamos esa caravana porque hay un gran trabajo frente nuestro.

Aún hay tantas cosas por hacer, tanta gente a la que tenemos que llegar, insha’Allah ar-Rahman, no por nosotros mismos. Nunca pienses que hacemos esto por nosotros mismos. Yo no estoy haciendo esto por mi mismo, ni tú lo haces por ti mismo. Somos apoyados por nuestro Sheykh. Físicamente, antes que partiera, él nos apoyaba. Luego de su partida, él nos apoya (espiritualmente) y Sheykh Mevlana nos apoya físicamente. Somos su Amanat.

Así que todos tenemos trabajo que hacer. Elige el trabajo que quieras. Este trabajo que nuestro Sahib us Sayf está cargando es un gran trabajo aquí en este mundo físico, y una vez que acabemos en este mundo físico, en ese momento, podremos decir que nos vamos a encontrar con él en Damasco. Insha’Allah, lo haremos. Así es. Esa es nuestra fe y ese es nuestro anhelo, estar con él, ¿no es así? Aquí y en la Próxima Vida.

El trabajo aún continúa, porque Sheykh Effendi ha entrenado gente. Él ha entrenado a tanta gente para continuar el trabajo. Tal vez no lo sepas. Tal vez tus ojos estén cerrados. Está bien. Sheykh Effendi hace las cosas perfectamente.

Nuestro trabajo aún continúa. Nuestro trabajo, como el trabajo de los Sahabi-e Kiram, cuando el Sagrado Profeta (asws) se retiró del mundo, no terminó allí. Los Sahaba-e Kiram no terminaron y se sentaron en la mezquita (a descansar). No. Es sólo el comienzo del trabajo.

Este es el comienzo de nuestro trabajo. Por lo tanto debemos comenzar y debemos permanecer juntos.

Así que sí, él nos ha preparado y ese trabajo nos aguarda enfrente y continuaremos con él. Insha’Allah, Sheykh Effendi ha dejado tantos pilares. Como he dicho, no solamente aquí, también en todas partes del mundo. Él ha dejado tantos pilares en Alemania, en Turquía, en Chipre, en América del Sur, en Malasia, en India.

En todos lados. Los ha puesto allí, y la gente allí está continuando su trabajo. Mis palabras para ellos: continúen el trabajo. No se detengan. Háganlo mejor. No se detengan. Carguen más. No se detengan. Sean más activos. Estén más ocupados. Porque no se debilitará. No se va a empequeñecer. Insha’Allah ar-Rahman se hará más grande. El tiempo se acerca rápidamente al final. Así que mis salams a todos quienes son parte de la Yama’at de Sheykh Effendi. Todos estamos aquí como una Yama’at. Todos estamos aquí como hermanos, hermanas, madres, padres. Aférrense con fuerza, insha’Allah ar-Rahman, aférrense con fuerza a nuestro Sheykh.

Nuestro Sheykh no está muerto. Él se ha retirado (del mundo físico), él está velado y está aquí. Él es Sahib us-Sayf. Ellos dicen que los Awliya’, el Santo, cuando está vivo físicamente en este mundo, él es como una espada enfundada, envainada. Cuando se retira del mundo, él es como una espada desenvainada, y esa espada ahora comienza a trabajar.

Nuestro Sheykh es Sahib us-Sayf (el Dueño de la Espada).

Así es, él está en todos lados y él nos está observando, él está observando nuestros corazones y nosotros tenemos que permanecer juntos, insha’Allah ar-Rahman, para continuar con el trabajo.

Wa min Allahu Taufiq.

-Khoja Lukman Effendi-

domingo, 19 de agosto de 2012

La Oscuridad de Ajir Zaman y la Luz de los ‘Awliya


Bismillahi Rahmani Rahim
Observa cuán enojado está el cielo, observa. Mira qué está ocurriendo. Observa. Observa cuán enojada está el agua, observa cuán enojado está el aire. Observa cuán enojada está la tierra. Todos dicen: “Ya Rabbi, danos permiso.” La tierra dice: “Dame permiso, ya Rabbi, ya que nunca he cargado sobre mí este tipo de criaturas. Dame permiso, déjame arrojarlas lejos, ya que me están pisoteando; las enviaré hacia ese vacío, hacia ese agujero negro del que has hablado, que devora la zona, arrojándolas allí.” Aun así, Allah-swt- es paciente con estas pequeñas criaturas que ha creado.

¿Cuándo vas a despertar? Toma solamente un segundo para que la tierra entera sea acabada. ¿Has pensado en ti, que dices “y qué mas da, qué puedo hacer yo”? ¿Piensas que eso te va a ayudar? Más allá de eso hay un desastre mayor, porque sabes como correr tras tu ego. Lo sabes. También sabes que tienes un Creador, Allah-swt-, quien te ha creado, también lo sabes. Y también sabes que Él tiene autoridad sobre ti, y que te ha ordenado que vivas de acuerdo a ella. Corriendo aquí, corriendo allí, no pienses que vas a escapar de la mano de Allah-swt-. Corre a cualquier lado, todo ya ha sido tomado. Todo estado, toda ciudad. Nada va a llegar desde el cielo. No. Tampoco nada vendrá desde la tierra. Si uno de esos Awliya’Allah en esa ciudad está enojado y da la orden, la ciudad entera quedará perturbada.

Terremotos. Le tienes temor a los terremotos, así es. Porque no tienes temor de tu Señor. No tienes Taqwa. Por esto tienes temor a los terremotos, tienes miedo que caigan los cielos. Temes a los rayos, así es. Porque no tienes temor de tu Señor; les temes al gato y al perro. Le temes a los animales, así es. Porque no tienes temor de tu Señor.

Le tienes temor a la oscuridad, porque estás a oscuras, no estás corriendo hacia aquel que está sosteniendo la luz. Nunca vas a encontrar esa luz. Nunca, mientras no vayas hacia ese y te sometas a ti mismo. Si no estás encontrando esa luz en dunya, no llevarás esa luz a la tumba. Puedes correr, puedes decir que el mundo tiene tanta luz…así es.

El Sagrado Profeta (asws) dice que en Ajir Zaman lo oscuridad lo cubrirá todo. Nubes negras van a estar en todos lados. Oscuridad. Nubes negras. Hmm.

¿Tú estás inmerso en nubes negras, o piensas que el sol está allí fuera? No. No es así. Todo está a oscuras. Tú estás a oscuras y los ‘Awliya Allah están en la luz…

Y los ‘Awliya Allah te dicen: “Lo que tengo en mi mano es de color blanco (es luminoso)”.

La gente de hoy en día debate: “Lo que dice ese ‘Awliya, ¿es correcto o incorrecto?”, oh, masha’Allah, subhan Allah, ¡qué conocimiento! El animal tiene mejor conocimiento que ese. Porque el animal lo ve, y tu no estás viendo esa luz. Estás completamente a oscuras.

Así que, ¿dónde está tu erudición? Has obtenido tu erudición de escuelas judías. Eso es lo que es. ¿Y piensas que eso te va a dar luz? No. Los ‘Awliya la sostienen y dicen: “Ten cuidado; lo que hay allí es negro”, y se vuelven (contra ellos) diciendo: “Huh, yo lo veo blanco”.

El Sagrado Profeta (asws) ha dicho: “En Ajir Zaman, el Dayyal y Sheytán te van a mostrar lo blanco como negro y lo negro como blanco.” Y sí, la gente de hoy en día esta viendo Haqq batil (la Verdad como falsedad) y batil Haqq (lo falso como Verdadero). Eso es lo que están viendo. Y corren tras batil, corren tras cosas incorrectas. “Porque eso es lo que se ajusta a mi ego.” Tras eso corren. Conveniencia para el ego.

Y si estás corriendo tras (la luz), eres sincero y eres amin, ¿por qué le temes al terremoto? ¿Por qué le temes a esta naturaleza? ¿Por qué? Es señal suficiente que te demuestra que estás a oscuras. Entonces vuelve tus ojos hacia quienes tienen luz. Porque, que los aceptes, no les da ningún honor ni los eleva; y que no los aceptes, no los rebaja. Si los aceptas encontrarás seguridad. Si no los aceptas, cada día caerás en mayor oscuridad. Más oscuridad y más oscuridad; y exactamente eso es lo que Sheytán quiere de ti.

Si algo no es para ti, no pongas tu idea allí. No es para ti. No digas: “Esto debe ser de esta manera, o esto debe ser de esa manera.” No es para ti. Deja que lo manejen quienes tienen la autoridad para hacerlo. Si metes tu nariz en esas cosas te quedarás solo. Y te vas a encontrar a ti mismo en el lado incorrecto, en la oscuridad.

No creo que puedas ser más poderoso, con más conocimiento que Abu Yahil. No creo que seas más poderoso y que tengas más conocimiento que Faraón. No creo que seas más poderoso y que tengas más conocimiento que Namrud. No creo que seas más poderoso y que tengas más conocimiento que Sheytán. ¿Qué es lo que declaras? Como he dicho, si lees todos los libros, si te los devoras uno por uno, si tienes una gota de conocimiento, conocimiento oculto, no vas a hablar sinsentidos. Si lo estás divulgando demuestras que no sabes nada. ¿De dónde obtienes ese permiso? De tu Sheytán, sí. No de Rahman.

¿Qué piensas que todos esos profetas vinieron a decir a quienes se opusieron a ellos? ¿Les dijeron: “He venido aquí para llevarte al infierno”, o: “He venido para llevarte al Paraíso”? Sí. Eso (último) es lo que el Sagrado Profeta (asws) les dijo. Les dijo: “Digan ‘La ilaha illa Allah’”. Ellos se rebelaron contra el Profeta (asws). ¿Quién les dijo que se rebelaran? Sheytán, sus egos. Porque ellos adoraban a sus egos. Bajo el nombre de ídolos, esto y lo otro, ellos adoraban a sus egos. Y se rebelaron contra el Sagrado Profeta (asws) que les decía: “Estoy aquí para mostrarles el camino hacia el Paraíso. Estoy aquí para mostrarles cómo vivir como seres humanos. Estoy aquí para mostrarles cómo observar los derechos propios y de los demás. Estoy aquí para enseñarles qué es halal y qué es haram. Allah me ha enviado a ustedes para que les enseñe esto.” ¿Qué es lo que hicieron? Se levantaron contra el Profeta.

Y durante 13 años corrieron para hacer miserable la vida del Profeta (asws). Él no era miserable, sus Sahabis tampoco lo eran; ellos (los incrédulos) pensaron que lo habían hecho. ¿Luego qué sucedió? 13 años después le fue ordenado al Profeta: “Ahora déjalos. Vete de esta ciudad. Déjalos.” Y él se fue. Emigro de Mecca a Medina. Esos con características animales no se quedaron (tranquilos) en Mecca. Si se hubiesen quedado en Mecca, tal vez les habrían llegado algunas bendiciones que los hicieran despertar. Pero no, ellos corrieron tras el Sagrado Profeta (asws) para nuevamente acabarlo en Medina. ¿Por qué? Porque el Profeta (asws) les decía: “Vuelvan sus rostros de dunya hacia ‘Ajirat; vuelvan sus rostros del infierno al Paraíso”, eso es lo que les dijo. Llegaron hasta las puertas de Medina para acabar con el Profeta (asws). ¿Allah permitió que esto ocurriera? No, ellos se acabaron a sí mismos. Ellos quisieron infierno, ellos entraron al infierno.

¿Cómo es que declaras seguir al Profeta (asws) y estás corriendo hacia el fuego? Tu ego es quien te dirige hacia el fuego. Tú no quieres venir aquí, no quieres escuchar a nadie, porque estás escuchando a tu ego. Tu ego te hace feliz. Si el día tiene 24 horas, incluso esa felicidad, que sólo te llega en 5-10 minutos y el resto sólo es sufrimiento, y esos 5 minutos te alcanzan, ese pequeño momento de felicidad, no es por ti. Es porque ese ‘Awliya vino a visitarte, quitarte el peso de encima y dejarte descansar un momento. ¿Aún te vas a ir a dormir? Así es, duerme si quieres.

Como lo dice el Sagrado Profeta (asws), ellos tienen la luz, ellos están mirando con esa luz, observando con esa luz. Tú estás a oscuras, ellos tienen la luz. Que aceptes o no lo que ellos dicen, sólo a ti te será de beneficio.

-Sheykh Abdul Kerim Effendi-


jueves, 16 de agosto de 2012

¡No seas esclavo del mundo!


Bismillahi Rahmani Rahim

Allah-swt- te ha creado como ser humano; Él te llamó Hazrati Insan; Él te dio un título para que seas Su Jalifa; Él hizo que Sus ángeles se postraran ante ti; incluso Yibril (as) hizo saydah; todos los demás ángeles se postraron ante ti, y tu estás ocupado con el sinsentido de este mundo, el mundo al que Allah-swt- no le ha dado valor alguno. Estás ocupado con eso, estás manteniéndolo como una prioridad.

“Oh Sheykh, también necesitamos del mundo”

Por supuesto que necesitas del mundo; por supuesto que tienes que trabajar para vivir en los límites de lo Halal, ¿pero por eso piensas que tienes que ser esclavo del mundo? No, no tienes. Tienes que correr para obtener el sustento que Allah te da aquí y allí. Pero tienes que correr para ser siervo de Allah-swt-. No ser un esclavo de este mundo.

La mayor parte de la gente se ha vuelto esclava del mundo. Desde el trabajador hasta el jefe. Desde los porteros a los presidentes. Desde los pastores a los reyes. Las personas de hoy en día se han dado vuelta para convertirse en esclavas del mundo.

Allah-swt- creó el mundo y todo en él para nuestro servicio. Él nos creó a nosotros para Su servicio; si estamos observando lo que Él nos dice: “Haz estas acciones y aléjate de estas acciones”, Él te vestirá con otras vestimentas secretas, con las que te dará un poder para que digas “Kun, faya Kun”, “Sé”, y las cosas ocurren para ti. De otra manera, nada sucede para ti.

Y las Naciones del Islam hoy en día corren hacia las puertas, corriendo, suplicando, a las puertas de los incrédulos. Corriendo a las puertas de América, o Europa, o las Naciones Unidas… ¿suplicando la ayuda de quién? De los cruzados. De los quienes planearon e hicieron las Cruzadas para destruir el Islam.

Despiértate a ti mismo; no pienses que las Naciones vayan a despertar mientras tú no lo hayas hecho. Tú eres una parte de esa nación; eres un individuo que conforma esa nación. Si no estás despertando, Sheytán continuamente va a susurrarte y va a mantenerte ocupado con otras cosas. No vas a ser capaz de saber y entender qué es lo que Allah quiere de ti, con qué te ha vestido, qué clase de poder Él está preparando para darte, qué es lo que estás arrojando, por qué razón, por este dunya o por tu ego. Si eres uno de ellos, eres el tonto más grande.

Despierta, vuélvete, pide perdón. La puerta del perdón aun está abierta.

-Sheykh Abdul Kerim Effendi-

martes, 7 de agosto de 2012

Manteniendo la Amanat de nuestro Sheykh


Bismillahi Rahmani Rahim

Medet. Renovemos nuestra Shahadat.

Ash hadu an la ilaha illa Allah wa ash hadu anna Muhammadan ‘abduhu wa rasuluhu.

Pedimos el apoyo de nuestro Sheykh, Sahib us Sayf, Sheykh Abdul Kerim al-Kibrisi ar-Rabbani. Renovando nuestra Shahadat, renovando nuestra fe. Como dice el Sagrado Profeta (asws): “Oh, mi Nación, renueven vuestra religión.”

Este es el mejor mes, el mejor momento para que renovemos nuestra religión. Renovar nuestra religión porque nuestra religión envejece, se deshace, se ensucia. Toda nuestra adoración, todo nuestro ayuno, todo nuestro zakat, todo nuestro Hayy es para proteger esta Shahadat. No pienses que ahora porque solamente hemos dicho una vez la Shahadat esa fe ha entrado en nuestros corazones. ¿Hmm?

Como lo dice el Sagrado Qur’an, nuestro Sheykh Hazretleri lo ha dicho tantas veces: “Tu eres Musulmán, pero aún no eres Mu’min.” Lo dice el Qur’an-e Kerim. Así que, esa Shahadat ha pasado a través de nuestra lengua. Creyendo que sólo hay un Allah. Sin otros ilahs. Solamente un Allah. ¿Qué significa eso?

El significado es interminable. El significado, desde la pre-eternidad hasta la post-eternidad, puedes zambullirte y nunca acabar en ese océano, porque ahora todo está contenido en esa Shahadat.

¿Por qué estamos en asociación? ¿Por qué estamos en Tariqat? ¿Por qué estamos en Yama’at? ¿Por qué estamos siguiendo un Sheykh? ¿Por qué nos estamos alejando a nosotros mismos de la vida en este mundo, del que nadie puede decir que es un Paraíso? Es un infierno. Ellos han vuelto este mundo un infierno. Así es. Han vuelto un veneno la comida que comemos. Han vuelto un veneno el agua que bebemos.

El aire no es feliz con nosotros, la tierra no es feliz con nosotros, los cielos no son felices con nosotros. Los animales, las plantas, no son felices con la humanidad, porque en este siglo 21 la humanidad se ha vuelto tirana. Viviendo por la causa de sus egos. Adorando a sus egos. Adorando a otros que no son Allah.

Así que, ¿por qué estamos en Tariqat?

No es nada más que para renovar esta Shahadat y hacer que esta Shahadat se vuelva poderosa y limpia y más refrescante. Así es. Ash hadu an la ilaha illa Allah wa ash hadu anna Muhammadan ‘abduhu wa rasuluhu.

No ilahs, no ilahs. Sólo Allah. Todos los ilahs en Arabia, en Mecca, y en todos lados, tal vez ellos han destruido los ilahs físicos. Han quitado las estatuas. Han sido limpiadas de Mecca, han sido limpiadas de Arabia, han sido limpiadas de tantos lugares. Los ídolos, los falsos ídolos de adoración que no eran Allah, fueron derrocados.

Así es. Es fácil de hacer, como nuestro Sheykh Effendi ha dicho, es muy fácil derrocar los ilahs físicos. Ahora es el momento de marchar hacia el gran yihad, al Yihad ul-Akbar, que es el yihad contra tu nafs, contra tu ego, contra los deseos egoístas. Desde el yihad menor a este gran yihad, el Yihad ul-Akbar contra los ilahs que están aquí, que están en nuestros corazones. Quitar esos ilahs de nuestros corazones conlleva un enorme, grandioso yihad. Y el yihad no es un yihad físico, no es un yihad con espadas ni con armas, no. Ahora es un yihad contra ti mismo, contra tu nafs.

Estamos en Tariqat, así es, para luchar ese yihad. Estamos en eso para luchar este yihad que va a continuar hasta el Día del Juicio, que va a continuar hasta nuestro Día del Juicio, hasta nuestras muertes no acabará.

No piensen que el ego nos va a dar un descanso. No piensen que el ego va a decir: “Bueno, ahora te voy a dejar tranquilo.” No, el ego nunca duerme, sheytán nunca duerme, las fuentes de la maldad nunca duermen. Sólo nuestros murids están durmiendo frente nuestro. Sí, duermen.

Espera, espera, espera. Sheykh Effendi tiene tantas maneras de arreglarlo. Vas a ser arreglado porque estas palabras son la advertencia final para toda la humanidad, para mí, para todos. Estas son las enseñanzas vivas de nuestro Sheykh. No las vamos a hacer caer. Las vamos a poner elevadas en la cima de nuestras cabezas, para ponerlas en nuestras vidas.

Así es. Estamos aquí para quitar de nuestros corazones esos ilahs. No pienses, “Estoy hecho, estoy acabado, huh, ahora he alcanzado protección.” Tantos lo están diciendo. Entonces, ¿cuál es la diferencia entre nosotros y los cristianos que dicen, “Bueno, acepto a Jesús. Ahora estoy salvado. Puedo hacer las peores cosas, cosas egoístas, pero estoy salvado. Voy a ir al Paraíso.”?

¿Dónde está la justicia?

El Islam es justo. El Imperio Otomano es justo. La Shari’at es justa. Has dicho esta Shahadat, crees que hay un Allah. Ahora te llega la responsabilidad. Ahora no es que eres libre de hacer como gustes.

Los Musulmanes del siglo 21, llamándose a si mismos “Sufis”, llamándose a si mismos Ahli Tariqat, pueden pensar de esa manera. No es de esa manera, nunca ha sido de esa manera. Los más temerosos de su Señor son Sus Amigos (Awliya’) y Sus Profetas. Así es, pero la humanidad, queriendo decir, la necia humanidad, dice: “Aceptamos pero no hacemos”.

Nuestro Sheykh Effendi Hz. dice que es el significado, uno de los significados, cuando el Qur’an fue ofrecido a las montañas, montañas, no esas montañas físicas, las montañas, los Qutubs, los Amigos de Allah que mantienen estable al mundo, que mantienen el mundo en su lugar y por ellos llueve la Rahmat.

¿No lo ves? La mitad de América está seca. La sequía se acerca. Ya está aquí. Se sufre. Más va a llegar porque el Qutb, ese soporte, ese polo ha sido quitado. Nuestro Sheykh ya no está aquí físicamente. Así es. Y la Rahmat se ha detenido. Es gracias a ellos, no pienses que es gracias a ti o a mí.

Así que, sí, el Qur’an fue ofrecido a las montañas, y las montañas se negaron. Sin embargo se le ofreció al hombre, y el hombre necio, los ignorantes, los arrogantes, dijeron: “Sí, podemos cargarlo”

No. Estamos aquí renovando nuestra fe. Para decir que hay solamente un Allah y remover los ilahs de nuestros corazones. Estamos aquí siguiendo las enseñanzas de nuestro Sheykh, siguiendo las enseñanzas del Profeta (asws). Eso llega con la segunda parte de nuestra Shahadat: Ash hadu anna Muhammadan ‘abduhu wa rasuluhu. Ahora no puedes separar las dos. No las puedes separar, ya que el camino para llegar a Allah, el camino para deshacerte de los ilahs en tu corazón, el camino para reconocer que solamente hay un Allah –en ese momento, cuando lo reconoces, cuando te conoces a ti mismo, entonces empiezas a conocerLo y empiezas a adorarLo-, es a través del Profeta (asws), es mediante su estilo de vida, es mediante sus enseñanzas, es mediante su Shari’at, es mediante sus palabras, es mediante sus acciones, es mediante su vida.

No es algo que está separado. Así es, hoy en día los necios Musulmanes lo están haciendo. Están separando, están cortando, diciendo: “concéntrate en la ilaha illa Allah”. Hemos dejado atrás Muhammad Rasulullah, ya hu, ¿cómo vas a llegar a la ilaha illa Allah, si no vas a través del Profeta (asws)? ¿Significa que estás negando su Profecía?

Todos los 124.000 profetas no serían profetas sin primero reconocer que él es Muhammad Rasulullah, Sayyid al-Awwalin wal Ájirin. Así es. Y aceptar a ese Profeta (asws) no es sólo de palabra. No es sólo por decir. Es poniendo sus enseñanzas y su estilo de vida para hacer nuestro estilo de vida acorde a él. Ajustar nuestro estilo de vida de acuerdo al Islam. No ajustar el Islam de acuerdo a nuestro estilo de vida. Esto es un gran error, y hay una gran maldición cayendo sobre esta Ummat a causa de eso. Ya que desde la caída de la Jilafat en 1923, tempranamente, desde que la Ummat dijo: “No aceptamos ese Califa, no aceptamos ese Jalifatullah, no aceptamos ese Jalifatur Rasul, ese que está representando al Profeta (asws)”, desastres interminables están cayendo a este mundo desde ese entonces hasta hoy. Y más, y más, los Musulmanes, esta Ummat, han caído profundamente, profundamente, profundamente en lamentos interminables e insondables.

No vamos a salir hasta que el Sahib uz Zaman llegue y declare y pronuncie el Takbir.

Estamos aquí para prepararnos a nosotros mismos para eso. Así es. No pienses que estamos aquí solamente de vacaciones, un centro de retiro. Esto no es un retiro. No hay retiro ni jubilación en el Islam. En caso de que no lo hayas escuchado –estoy seguro que todos ustedes lo han hecho- uno de los últimos wasiyyat de Sheykh Effendi para nosotros, uno de sus últimos consejos para nosotros antes de que se retirara de esta vida mundana, antes de que fuera velado como fue velada la Jilafat, antes de que fuese velado, dijo:

“Llegó un murid y me dijo que el Sagrado Profeta (asws) fue a él y le dijo: ‘Dile a Sheykh Abdul Kerim Hz que advierta a sus murids que se mantengan limpios a sí mismos. Que se mantengan a sí mismos limpios y que estén preparados porque el tiempo está muy cercano, está muy cerca.”

¿Lo entendemos, lo comprendemos? Eso es lo que llega de nuestro Sheykh. ¿Entendemos que está llegando desde nuestro Profeta? ¿Entendemos que se nos da una advertencia abierta desde el Sayyid al-Awwalin wal-Ájirin? ¿Y ahora qué significa eso? ¿Qué significado va a tener el que nos mantengamos limpios y puros, y que nos alejemos de esta necedad para prepararnos, si no estamos siguiendo el camino de Muhammad Rasulullah (asws) enseñado por nuestro Sheykh, quien lo tomó del Sultán ul-Awliya’?

Así es. Sabemos dónde estamos. Somos nada. Somos criaturas, criaturas débiles de Allah-swt-, y estamos pidiendo perdón a Allah-swt- y que nos mantenga fuertes en este camino para mantener elevada esta Shahadat y para mantener con valor esta Shahadat, para ponerla y darle el honor que Allah-swt- le ha dado.

Así es. Allah ha puesto un elevado honor en esa Shahadat. Y esa es la Shahadat que va a ser la llave al Paraíso, la seguridad va a ser esa Shahadat. Pero –como Sheykh Effendi ha dicho tantas veces-, “la llave al Paraíso es esa Shahadat, pero si no se aman unos a otros, sin o se aman unos a otros, no sólo de palabra, si no se aman unos a otros, queriendo decir, que no das los derechos a los demás, quebrando las relaciones y causando fitnah, alejado de las enseñanzas y el estilo de vida del Profeta (asws) que nos ha traído nuestro Sheykh, no de acuerdo a nuestra propia inteligencia o a nuestros propios egos. Será como si nunca hubieses dicho esa Shahadat.”

¿Entendemos la importancia que tiene?

¿O sólo estamos…? Ehh, todos los días es lo mismo. El sol sale; solamente vamos a salir y llevar un estilo de vida robótico, nuestras propias vidas pequeñas de comer, beber, preocupaciones, estando ocupados con el dunya.

Vamos a perder mucho. Y vamos a perder más que aquellos que no han encontrado (conocido) a Sheykh Effendi, o no han estado en esta Tariqat, así es. Vamos a perder más. Porque no estamos manteniendo la amanat (el depósito de confianza), no estamos manteniendo la confianza que se nos ha dado.

Esa confianza, mantener nuestra Shahadat, esa confianza, mantenerla en este camino, esa confianza, sentarnos especialmente en este mes, sí, este es Ramadán Mubarak, Ramadán Karim, sentarnos para pasar tiempo, sin pensar en qué vs a comer y beber al momento del iftar, sin estar ocupado con “oh cuán hambriento y sediento estoy”, haciendo eso no tienes que ser Musulmán, un creyente, para hacer eso. Tanta gente también lo hace, lo llaman “dieta”.

En este mes estamos manteniendo encadenadas nuestras características animales. Sí, lo hacemos. Pero las características animales no son solamente comer, beber y tener relaciones. Estamos en Tariqat. Deberíamos conocer mejor. Lo que es se encuentra en nuestro interior, así es. Los enemigos que están en nuestro interior.

¿Estamos ocupados con esos enemigos? ¿Pensamos que el enemigo no está afuera, sino en el interior? Piensa, piensa.

Piénsalo de esta manera. Tienes una bella y hermosa casa, y la estás protegiendo de los peligros exteriores con puertas blindadas y sistemas de seguridad, etc.. Y en el interior todo es hermoso: tienes tus hijos, tienes tus tesoros, tienes de todo, pero sabes que el enemigo está dentro de tu casa. ¿Alguna vez vas a estar cómodo?

Dime algo. ¿Alguien alguna vez se va a sentir cómodo? ¿Vas a decir, “Bueno, ya he hecho mi parte; bueno, ya tome Shahadat; bueno, tome bayat; bueno, ahora soy un santo”? En estos días ellos también están diciendo eso, masha’Allah, todos son santos. ¡Esa es la razón de que este mundo se vuelva un Yahannam! ¡Esa clase de santos!

Nuestro maqam es en el toilet. Ese es nuestro maqam. Nuestro maqam, como lo dice Sheykh Effendi hz, cuando vas al toilet y te sientas allí y estás haciendo ese asunto sucio, del que tomas todas las cosas más bellas que llevan horas y días y meses y años de preparación –el dátil lleva cerca de 20 años de preparación para que lo pongas en tu boca, ¿no es así?, para que lo comas. ¿Qué ocurre cuando entra a tu cuerpo? ¿Sale como oro? ¿Sale como algo bello y con perfume agradable?

No. En nuestro interior se vuelve lo peor. Hacemos las mejores cosas para que se conviertan en lo peor a lo que ni siquiera los animales se pueden acercar. Piensa, sí, en ese momento, los Awliya’ Allah, sea lo que sea que tomen y beban, va a salir como almizcle, rosas y perfumes.

Como el Sagrado Profeta (asws), todo lo que salía de su cuerpo era lo más puro. Así que, piensa. ¿Cuánto pensamos en ese momento que este cuerpo, cómo podemos decir que este cuerpo, que esta persona que Allah ha creado, que toma las cosas más preciosas y las vuelve en lo más desagradable, cómo podemos decir que nuestro maqam es algo más elevado que ese toilet?

Siéntate y piensa. Sí. Quieres ser humilde. Eso no es ser humilde –eso es ser realista. Humildad es completamente otra cosa. Humildad es cuando estás haciendo todo bien y todo perfecto y las personas te atacan y te calumnian y tú sonríes y das vuelta tu rostro.

Tantos están diciendo, “No, somos Sufis censurables (Malamatis, fuera de la Ley Sagrada)”, ohh, ellos (los humildes, los Awliya’) no tienen nada con los Sufis censurables. Y sonríen no un día, dos días, décadas, años. Y aún continúan luego de que se han retirado de este mundo, después de todo, y es la Sunnah del Sagrado Profeta (asws).

Han pasado 1400 años y sin embargo los kaffirs nunca detendrán sus calumnias y lo que dicen del Sagrado Profeta (asws), mintiendo y diciendo de todo de él. Eso no cambia su realidad. Cada momento, cada minuto, cada hora, cada día, él está yendo hacia arriba, arriba y arriba. Su estación es más y más elevada. Y estamos rezando para que la estación de nuestro Sheykh Effendi sea más y más elevada a cada momento. Porque seguir los pasos de ese Profeta (asws) no pienses que solamente es una reunión social, que el Sufismo es una reunión social en el que las personas se juntan y llegan elegantemente vestidas sin conocer el adab correcto, solamente bebiendo, comiendo y adiós. No, no lo es. Es duro. Es trabajo.

Un día, una persona fue al Sagrado Profeta (asws) y le dijo: “Ya Rasulullah, te amo.”

El Sagrado Profeta (asws) le dijo: “Si me amas, prepárate entonces para la privación.”

Él no le dijo: “Si me amas, el mundo se va a abrir para ti, y los Paraísos se van a abrir para ti, y todo se abrirá para ti.” No. Le dijo, “prepárate a ti mismo para el trabajo”. Así es, esos son quienes tienen amor real. Y esos son quienes siguieron los pasos de todo profeta.

Aquellos que siguieron los pasos de Isa (as), de Ibrahim (as), de Musa (as), la privación los siguió porque es la vida de todo profeta (as); ellos no vinieron aquí para llevar una vida lujosa, para llevar una vida placentera y fácil, y no le enseñaron eso a sus Ummats. Y especialmente los más cercanos a ellos ni siquiera lo buscaban.

Observa. Nos llamamos a nosotros mismos seguidores del Camino Siddiqi, Siddiq ul Akbar. Sí, como lo dijo nuestro hermano (en un du’a), debemos sacrificar, sacrificar todo en ese camino. El sacrificio no es sólo físico; sacrificar tu ego. Seguir a ese (tu Maestro). Sacrificar tu ego y seguir ese Maestro. Ese que va a llevarte desde este dunya a Maula. El que te va a sacar del Yahannam que has creado en tu interior, quitarte el fuego que vas a llevar al Yahannam. No hay fuego en Yahannam. Tú llevas tu propio fuego a Yahannam, y él (tu Maestro) lo hace caer por ti, y él está quitando todas las objeciones, todos los ilahs, todos los ídolos de tu corazón, para decir: “¡Ahora dí ‘Allah’!”

Sigue a ese. No pienses que ese se va a sentar y te va a elogiar. ¿Qué clase de privación es esa? Masha’Allah, tan dura.

No. Ese te va a derribar pared tras pared. Ese dirá cosas y hará cosas y te guiará en un camino que tu ego no va a aceptar y que no le va a gustar. Pero ese te dirá: “Ven a esta estación. Ven a ese maqam que Allah ha creado para ti. Eso es tuyo y de nadie más. No estés atascado en este dunya, no estés atascado con este mundo, no estés atascado en este toilet, porque este mundo es un baño, es un toilet.”

Wa min Allahu Taufiq.

-Parte I del sohbet dado por Khoja Lukman Effendi, Califa de Sheykh Abdul Kerim al-Hakkani, el 27/07/2012-


lunes, 6 de agosto de 2012

Lo que Complace a Allah


Bismillahi Rahmani Rahim

El Sagrado Profeta Muhammad (asws) nos dice:

“Allah, el Más Alabado, el Más Elevado, ha ocultado Su Satisfacción y su Complacencia en las buenas acciones que llevas a cabo.”

Esto quiere decir que Él oculta la buena acción que ganará Su Complacencia entre todas tus buenas acciones.

¿Allah va a estar complacido porque rezas mucho, o Él va a estar complacido porque haces a un lado una piedra en la calle para que otro no tropiece con ella?

No lo sabes. No sabes que acción va a complacer a Allah y hacer que Él esté feliz contigo. Por esto es que el Sagrado Profeta (asws) dice que Allah está ocultando Su favor.

Siempre que una buena acción se presente ante el creyente, él va a correr para hacerla. “Tal vez con esta acción Allah esté complacido conmigo.”

Tú siempre vas a estar buscando la llave de la oportunidad, ya que está oculta y no lo vas a saber. Hasta que te llegue el Ángel de la Muerte vas a correr, moviéndote y haciendo cosas buenas.

Cuanto más cosas hagas por la Causa de Allah, más placer vas a sentir en el corazón, más satisfacción te va a llegar, y tu fe va a crecer con fuerza.

domingo, 5 de agosto de 2012

Conoce tus Límites


Bismillahi Rahmani Rahim
El mayor conocimiento para un hombre, ¿cuál es? Conocer sus límites. No trasponer tus límites. Cuando traspones tus límites te vuelves el peor ignorante y entonces Sheytán danza contigo, mientras tu piensas que estás bailando en el lado correcto. Sin embargo estás bailando en el lado incorrecto e incluso Sheytán se ríe de ti. Eso es lo que le ha ocurrido a esta nación.

Así que despierten a si mismos porque ya no queda mucho tiempo. La viveza ya no va a continuar demasiado. Chequéate a ti mismo. Obsérvate a ti mismo. ¿Cuál es el progreso que hiciste hoy? Allah-swt- te dio otras 24 hs. Viviste otras 24 horas. Chequea tu libro, observa y comprende cuantos pasos hacia delante diste, cuantos pasos te elevaste, cuantas veces hiciste a un lado cosas sheytánicas, de cuantas cosas malas te deshiciste y cuantas cosas buenas has recogido. Entonces lo entenderás. Entenderás dónde estás. Si no lo entiendes ahora entonces aguarda un momento. Cuando esta electricidad sea devorada –lo que va a ocurrir muy pronto- tu computadora va a irse, tu teléfono va a irse, tus libros no van a ser leíbles. ¿Qué vas a leer entonces? ¿Qué vas a saber entonces? Si te pregunto qué comiste ayer, no lo sabes. ¿Qué vas a saber entonces?

Así que conoce tus límites. No pases tus límites, porque te estarás perjudicando a ti mismo, a nadie más. Adam (as) llegó. Le habló a sus propios hijos. Les dijo qué es lo correcto y qué es lo incorrecto, qué es Haqq y qué es batil, qué es Halal y qué es Haram. Se los dijo. Aquellos a quienes no les gustó escuchar qué es Halal y qué es Haram se levantaron contra su padre diciendo: “Hacemos cómo nos gusta. Somos libres.” Les dijo: “No pueden hacer lo que les gusta. No son libres. Tienen un Señor que los ha creado y están bajo la obligación de escucharlo y obedecerlo. Y debes escucharlo a través mío.” Eso les dijo: “No pueden escuchar a su Señor (directamente), pero lo pueden escuchar a través mío” Cometieron la misma arrogancia diciendo: “¿Por qué no? Tú eres como nosotros. Tú has sido hecho de huesos, carne y sangre. ¿Cuál es la diferencia?”

Exactamente como este sistema perverso, este sistema democrático, le ha enseñado a cada uno de ustedes a ver al rey y al portero en la misma categoría, a ver a los profetas y a las sirvientas en la misma categoría. Eso es lo que este sistema perverso está mostrando. Eso es lo que le agrada al ego. Toma al portero y hazlo rey, y mira al día siguiente lo que ocurre con el reino. Oh, tú no tienes que hacerlo; tú ya lo has hecho. Esa gente occidental lo hizo. Removieron toda piedra donde se asentaba. Tocaron todo secreto. Están cerca de tocar algunos más y el mundo entero está cerca de colisionar sobre sus cabezas y sobre todos esos que están siguiendo esas ideas occidentales.

Sal de allí. Sal de esa enfermedad. Esa es una gran enfermedad. No toques lo intocable. No intentes remover lo puesto por Allah. Aprende cómo ser un siervo obediente de Allah-swt-.

¿Qué es tiranía? Un hombre que no conoce sus límites. Ese es tirano. Ese es tirano para si mismo y para los demás. Definitivamente. Hombres y mujeres, quienes no conocen sus límites, son tiranos. Así es.

El mayor conocimiento es que un hombre conozca sus límites. Cuando terminas allí, erígete sobre tu ego y ve a encontrar alguien, pregunta y aprende el conocimiento que desconoces. No abras libros y computadoras (buscando conocimiento), porque Sheytán sabe mucho mejor que tú. Sheytán ha puesto tanto juego allí. Apenas quita una palabra y destruye todo el significado de las enseñanzas del Sagrado Profeta (asws). Tú no tienes la visión para verlo. Sí, el Sagrado Profeta (asws) nos dice: “Ten cuidado con la visión del creyente.” Sin embargo, tú no tienes esa visión para ver qué es lo que ha sido quitado y qué no. Necesitas buscar a alguien, sentarte, escuchar, comprender y hacer.

-Sheykh Abdul Kerim Effendi-

jueves, 2 de agosto de 2012

La Advertencia Adecuada


Bismillahi Rahmani Rahim

Nos aguardan días difíciles. Justo frente nuestro. No es tan fácil. Nos aguardan días muy difíciles. Despiértate a ti mismo. Entiende dónde estás, a qué lado te estás aferrando, en qué rango o estación estás, para qué estás intentando cambiar, para qué estás cambiando.

Observa tus valores, comprende quién eres, qué eres y por qué estás viviendo. Entonces lo entenderás. Y aférrate con fuerza a eso, porque Dayyal está viniendo para darte lo que tu ego quiere, exactamente como esas personas que me dicen: “Sheykh, eres muy duro con nosotros”, van a decir: “Dayyal es muy suave con nosotros. Dayyal viene a darnos todo lo que queremos.” Eso es exactamente lo que Dayyal va a hacer, él va a alimentar el ego de todos. Esa es su tarea.

(En cambio) los diputados de Mahdi (as), los diputados reales, su tarea es dar la advertencia adecuada a la gente y a sí mismos, diciendo: “Esto es lo que te espera. Esto es lo que me espera. Pero lo peor es que tal vez no lleguemos a mañana. Mañana es un signo de interrogación. Desconocido. No sabemos si vamos a vivir mañana. Así que vive correctamente hoy. Termina correctamente el hoy. Pon la intención de mañana vivir por la Causa de Allah. Incluso si no sabes nada, no importa. Haz que tu intención sea correcta. Encontrarás que Allah-swt- pone ante ti el camino recto.”

-Sheykh Abdul Kerim Effendi-