Bismillahi
Rahmani Rahim
Pregunta:
Estoy atravesando etapas, en tanto me encuentro haciendo progresos y sintiendo
una fuerte conexión y luego siento que no estoy haciendo ningún progreso. ¿Se espera que sea así o debería hacer algo
diferente, insha’Allah?
Khoja
Effendi: Este atravesar etapas de arriba y abajo, es normal. ¿Cuándo
termina la etapa? Cuando tienes una paz completa, que tu etapa no va hacia
arriba ni hacia abajo, es cuando tienes una sumisión completa.
No puedes obtenerlo de los
libros. Sino que toma años, un entrenamiento muy duro, ya que el sometimiento
es la cosa más natural para nuestro espíritu, ya que nuestro espíritu se somete,
pero es lo más difícil, ¿para quién? Nuestro ego, la dirección opuesta.
Estamos viviendo en este mundo,
tenemos este mundo que es un enemigo, tenemos deseos que son un enemigo,
tenemos Sheytán que es un enemigo, y tenemos el ego que es un enemigo: cuatro. Y
tenemos un espíritu. Y si ahora somos capaces de pararnos sobre estos enemigos,
ellos nos impulsarán alto, ya que ellos no están allí para que los destruyamos.
No. Ellos están allí para hacernos crecer, para llevarnos a una estación más
elevada.
Cuando los arroyos o los ríos
están marchando, vivimos en el país y a veces podemos escuchar, especialmente
cuando cae mucha lluvia, puedes escuchar de tu casa la corriente burbujear. Hace
mucho ruido. Cuando llega al río, más ruido, un montón de ruido.
Pero cuando llega al océano,
¿qué sucede?
Es sólo un completo silencio.
Así que nuestros egos son de
esa manera. Hasta que lleguemos a ese océano, hasta que nos sometamos a ese
océano, siempre será arriba y abajo. Y
eso también es necesario. No puedes pasarlo por arriba. Ahora no me
puedes preguntar: “¿Hay algún du’a especial para hacer? ¿Hay algo, algún atajo?”
No.
Los Compañeros del Profeta,
para alcanzar esa sumisión, no tuvieron ningún atajo. De hecho, lo tuvieron más difícil que nosotros. Fueron
probados de toda manera. ¿Y qué obtuvieron de esa prueba? Obtuvieron la
estación más elevada. Luego del Profeta, obtuvieron la estación más
elevada. Ellos atravesaron veintitrés años de dificultades, muy duras
dificultades. No sólo para sí mismos, sino para sus hijos, para sus familiares.
Ellos lo sacrificaron todo. Si queremos esa estación, que se supone que la
Tariqat nos tiene que preparar para esa estación, entonces prepárate para la
dificultad. Si amas al Profeta (asws), prepárate para la dificultad.
Así que, esto es normal. Permanece
con eso. Tanta gente se da por vencida. En los viejos tiempos se daban por
vencidos cuando entraban primero. Lo cual es comprensible. Algunos se daban por
vencidos un poco después de eso. Algunos se daban por vencidos a la mitad del
camino. Decimos: ¿A la mitad del camino te das por vencido? Muy bien. Ahora,
una nueva moda, debido al Ajir Zaman, ellos se dan por vencidos cuando la
carrera está por terminar, se dan por vencidos. Se dan por vencidos, no porque
el dunya les ofrezca millones de dólares, oro y joyas y gentes y posición. No. Se dan por vencidos por nada. Por nada. Y el
ego los engaña, y se dan por vencidos por nada.
Algunos dicen: “Oh, me tengo
que encontrar a mí mismo”. Otros dicen: “Oh, tengo que encontrar un trabajo”. Otros
dicen: “Oh, tengo que cuidar de esto, tengo que hacer esto por mis familiares,
esto y eso…”. Sí, a ti te importan tus familiares, pero todos estos años, ¿qué
hiciste? ¿Te sentaste a hablar, a entender qué es? Ya que la gente puede
utilizar la importancia por los familiares, hijos, todo, como una excusa. Pero si
te sientas y entiendes, una vez que has elegido el camino, no hay excusas. No te
estás haciendo cargo de tus familiares. Allah se está haciendo cargo de ellos. Si
piensas: “Sin mí, nada va a suceder”, especialmente si te niegas a tener
ninguna consulta, entonces has perdido. Has perdido y has perdido. Y el fuego
del remordimiento es peor que el fuego del infierno.
Insha’Allah, aquellos despertarán. Pero,
ya estamos casi al final de la carrera. ¿Qué carrera? Tenemos todo el lujo. Si nos
comparamos con los Sahaba, con los Compañeros, y cómo vivían los Awliya’Allah,
estamos en el lujo. Así que, ¿cuál es la queja? Solamente el ego se queja.
SelamAleykum Warahmatullahi Wabarakatuhu
Hoja
Lokman Efendi Hz, Califah de Sheykh Abdulkerim el Kibrisi (qs) * OSMANLI
DERGAHI- New York. 8 de agosto de 2014