Bismillahi
Rahmani Rahim
Cuando el Sagrado Profeta
(asws) se retiró de este mundo dejó tras de si pilares poderosos. 124.000
Sahabis, ellos estaban allí. Sin embargo, luego de que él partió, ¿qué ocurrió?
¿Qué le ocurrió a Arabia? ¿Qué les ocurrió a los beduinos, a la mayoría de
ellos que dieron su bayat al Profeta?
Lo traicionaron. Dijeron: “¿Por
qué ahora tenemos que seguir a Abu Bakr? Nuestro bayat fue con el Sagrado
Profeta (asws), quien ha acabado. Él ha acabado. Somos independientes, podemos
hacer como nos guste.”
Sucedió. Sucede. Y va a
continuar sucediendo.
Algunos se declararon profetas,
Musaylamah, el mentiroso. ¿Hazrati Abu Bakr le dijo: “Bueno, vamos a sentarnos.
Hagamos una reunión y negociemos”? ¿Lo llamó diciéndole: “Bueno hablemos bien”?
Él envió un ejército para
acabarlo. Así es, e incluso hubo mujeres profetas. Esto es historia. Niégalo
cuanto quieras.
Así es, mujeres profetas
viviendo y declarando: “Sí, también somos profetas.”
Sheykh Effendi Hz. ha
mencionado esto tantas veces, y yo voy a continuar diciéndolo, te guste o no. Y
esas también fueron quienes se sentaron en la presencia del Profeta (asws) y
tomaron algo del Profeta, y ahora van y declaran ser algo. Y esa también está
acabada. Esa y Musaylamah se casaron, y el uno le daba la dote a la otra
diciendo: “Oh, no hay necesidad de cinco oraciones diarias; tres oraciones
diarias, mi querida. Esa es mi dote para ti.”
Ocurrió.
Así que, estos no son cuentos.
Son historias, experiencias, realidades que ocurren y que van a continuar
ocurriendo.
¿Qué parte de la historia vas a
jugar?
Aquellos que continuaron luego
de la partida del Sagrado Profeta (asws) siguieron con su trabajo. No lo
hicieron a un lado. No lo debilitaron. Se volvieron más fuertes. Se volvieron
incluso más rigurosos.
Hazrati Abu Bakr, ese que era
tan suave cuando el Sagrado Profeta (asws) estaba vivo, ese del que incluso su
hija decía: “Ya Rasulullah, no hagas que mi padre sea Imam ya que llora
demasiado (al momento de dirigir la oración, Abu Bakr entraba en tal estado de
emoción espiritual que no podía contener el llanto)”, ese se volvió un león. Él
se transformó en un león. Así es. Y acabó con tantos desobedientes…
Nuestra aspiración, nuestra
intención, nuestra niyat, es volvernos buenos obedientes de nuestro Sheykh. Él
no está muerto. Algunos dicen: “el muerto está muerto.” Él no está muerto. Él
está velado. Incluso Sheykh Mevlana ha dicho: “Es una apariencia. Él se ha ido
al Monte Qaf.”
“No digas de quienes han muerto
en el Camino de Allah que están muertos”, ¿no es así esta ayat? ¿No la conocen
todos? Especialmente la gente sufí, ¿no la conocen?
Así que esos que dicen, “él
está muerto, él está muerto”, como gusten. El ayat dice otra cosa. El Qur’an
dice otra cosa. Tu Grandsheykh dice otra cosa. Tú puedes decir lo que quieras
porque los perros ladran. Ladrar es el deber de los perros, pero la caravana
continúa. Insha’Allah ar-Rahman, continuamos esa caravana porque hay un gran
trabajo frente nuestro.
Aún hay tantas cosas por hacer,
tanta gente a la que tenemos que llegar, insha’Allah ar-Rahman, no por nosotros
mismos. Nunca pienses que hacemos esto por nosotros mismos. Yo no estoy
haciendo esto por mi mismo, ni tú lo haces por ti mismo. Somos apoyados por
nuestro Sheykh. Físicamente, antes que partiera, él nos apoyaba. Luego de su
partida, él nos apoya (espiritualmente) y Sheykh Mevlana nos apoya físicamente.
Somos su Amanat.
Así que todos tenemos trabajo
que hacer. Elige el trabajo que quieras. Este trabajo que nuestro Sahib us Sayf
está cargando es un gran trabajo aquí en este mundo físico, y una vez que
acabemos en este mundo físico, en ese momento, podremos decir que nos vamos a
encontrar con él en Damasco. Insha’Allah, lo haremos. Así es. Esa es nuestra fe
y ese es nuestro anhelo, estar con él, ¿no es así? Aquí y en la Próxima Vida.
El trabajo aún continúa, porque
Sheykh Effendi ha entrenado gente. Él ha entrenado a tanta gente para continuar
el trabajo. Tal vez no lo sepas. Tal vez tus ojos estén cerrados. Está bien.
Sheykh Effendi hace las cosas perfectamente.
Nuestro trabajo aún continúa. Nuestro
trabajo, como el trabajo de los Sahabi-e Kiram, cuando el Sagrado Profeta
(asws) se retiró del mundo, no terminó allí. Los Sahaba-e Kiram no terminaron y
se sentaron en la mezquita (a descansar). No. Es sólo el comienzo del trabajo.
Este es el comienzo de nuestro
trabajo. Por lo tanto debemos comenzar y debemos permanecer juntos.
Así que sí, él nos ha preparado
y ese trabajo nos aguarda enfrente y continuaremos con él. Insha’Allah, Sheykh
Effendi ha dejado tantos pilares. Como he dicho, no solamente aquí, también en
todas partes del mundo. Él ha dejado tantos pilares en Alemania, en Turquía, en
Chipre, en América del Sur, en Malasia, en India.
En todos lados. Los ha puesto
allí, y la gente allí está continuando su trabajo. Mis palabras para ellos:
continúen el trabajo. No se detengan. Háganlo mejor. No se detengan. Carguen más.
No se detengan. Sean más activos. Estén más ocupados. Porque no se debilitará. No
se va a empequeñecer. Insha’Allah ar-Rahman se hará más grande. El tiempo se
acerca rápidamente al final. Así que mis salams a todos quienes son parte de la
Yama’at de Sheykh Effendi. Todos estamos aquí como una Yama’at. Todos estamos
aquí como hermanos, hermanas, madres, padres. Aférrense con fuerza, insha’Allah
ar-Rahman, aférrense con fuerza a nuestro Sheykh.
Nuestro Sheykh no está muerto.
Él se ha retirado (del mundo físico), él está velado y está aquí. Él es Sahib
us-Sayf. Ellos dicen que los Awliya’, el Santo, cuando está vivo físicamente en
este mundo, él es como una espada enfundada, envainada. Cuando se retira del
mundo, él es como una espada desenvainada, y esa espada ahora comienza a
trabajar.
Nuestro Sheykh es Sahib us-Sayf
(el Dueño de la Espada).
Así es, él está en todos lados
y él nos está observando, él está observando nuestros corazones y nosotros
tenemos que permanecer juntos, insha’Allah ar-Rahman, para continuar con el
trabajo.
Wa min Allahu Taufiq.
-Khoja
Lukman Effendi-
Subhana Rabbi al Azim , Allah te de Regale un lugar amplio y verde el al yanna a ti y todos los que están contigo . Daniel
ResponderEliminarSalam aleykum Hermano
EliminarPara usted también, insha'Allah.